Diario de Sevilla _ Viernes 31 de Octubre de 2014

Este nuevo concierto del Festival de Guitarra se abrió con un recital hermosísimo, pero sombrío, del italiano Lorenzo Micheli, que sirvió como presentación de su último trabajo discográfico, “Autumn of the Soul”.

Auténtico recorrido por el “otoño del alma”, Micheli planteó su actuación como un sugerente acercamiento a las sombras de su instrumento, que fueron también las del ser humano, de los “Caprichos de Goya” magnificamente atrapados en imágenes impactantes por Castelnuovo-Tedesco, con su “Dies Irae” en forma de Passacaglia o sus intensísimos monstruos del final, a la intrigante “Canzone notturna” de Gilardino, conformada sobre un tetracordo que no termina de resolverse, creando una tensión en el oyente que en cualquier caso fue aún más acentuada en “Dipsô”, la pieza central del tríptico de Vicente Asencio “Suite Mística”, con sus acordes abruptos y su fraseo entrecortado.

Guitarrismo de matices mínimos, de bajos resonantes, de dinámicas leves el del gran maestro italiano.

Pablo J. Vayón